domingo, 15 de febrero de 2015

Cada Vez que confío en Dios y me rindo ante Él Dios realmente me Ayuda

Como resultado de poner en practica el Programa de Al-Anon durante varios años, he aprendido que la aplicación de los Pasos requieren cosas esenciales. Primero, tener siempre presente la sugerencia de entregar lo que sea, acerca de uno mismo o de aquella persona que uno esté tratando de controlar. En otras palabras, debo soltar las riendas de mi ego. SOLTAR LAS RIENDAS, ENTREGARLO Y MANTENERLO SIMPLE ME RECUERDAN QUE DIOS SE OCUPA DE MÍ Y DE LOS DESAFÍOS QUE ME IMPONE LA VIDA.   A veces cuando me siento extremadamente tensa, la entrega no se produce con facilidad. En última instancia, hasta debo soltar las riendas de mi proceso de entrega.  No puedo controlar el momento en que mi Poder Superior decida otorgarme la gracia de actuar y sentir con serenidad.
En segundo lugar, para la aplicación de los Pasos se necesita tener FE, lo que requiere simplemente confiar en que mi Poder Superior está a mi lado, a veces pese a mí mismo y a todos mis esfuerzos. Debo escoger la mejor manera de actuar sobre la base de esa confianza. He descubierto que puedo entregar el control y mi voluntad infinitamente, pero la entrega no tiene sentido a menos que le dé  seguimiento a través de la Fe. Cuando me olvido de la Fe, me vuelven las preocupaciones una y otra vez. Cuando dudo de que Dios me esté escuchando, lo único que tengo que hacer es recordar  las muchas veces en que la paz me ha invadido en el pasado. A partir de allí la Fe se encarga del resto.
"Cada Vez que confío en Dios y me rindo ante Él Dios realmente me Ayuda"